Esta semana iniciaron las obras del nuevo parque público en la calle Ipiranga, en Boulogne. Los trabajos comenzaron en la intersección con la calle Serrano y avanzarán hasta Rolón. Se trata de una transformación integral del área, con mejoras en infraestructura, tránsito y seguridad. 

Ipiranga es una calle angosta de doble mano, con poca circulación e iluminación. A partir de esta obra, los sentidos de circulación de la calle estarán separados por un amplio bulevar que constituirá el nuevo parque de 22 metros de ancho y una extensión de más de 600 metros. 

En total el parque tendrá una superficie de 11.500 m² e incluirá nuevas veredas más amplias, cruces peatonales elevados, bicisendas, zonas de ejercicio, juegos y áreas de descanso. Se conservarán los árboles y se sumarán nuevos ejemplares autóctonos, promoviendo la biodiversidad.

La obra, una iniciativa de cooperación público-privada que avanza sobre un terreno privado recuperado para su uso público, durará unos cinco meses. El proyecto desarrollado entre ambos sectores es ejecutado por el privado. 

El proyecto aprobado durante la gestión anterior, fue mejorado por la actual administración. Entre los principales cambios, se destaca que la obra del parque comienza antes que el desarrollo privado previsto en los terrenos linderos, donde además se redujo la densidad del futuro barrio (de 65 a 49 lotes) y se ensancharon las calles internas para cumplir con la normativa provincial, favoreciendo así la seguridad y el orden vial.

Forma parte del plan integral de puesta en valor de Boulogne, que también incluye la modernización del Campo de Deportes Nº 2 y su anexo, la reparación de calles y veredas, y mejora Integral de Arbolado.